martes, 14 de diciembre de 2010

13. Un gesto rápido, leve y tonto

Akane miraba a Shikamaru algo intrigada mientras repasaba las palabras que él había dicho.

"Pues porque quise evitarle a Sakura el disgusto de ver a Sasuke contigo, pensé que ya había llorado demasiado, no es agradable ver a la persona que te gusta con otra... te aseguro que no se siente nada bonito."

¿Sería posible que de verdad quisiese evitarle un disgusto a Sakura?

- Sucedió justo cuando salíais de la exposición - explicó de pronto Sumire como si supiese lo que Akane estaba pensando - Lo hizo para distraer la atención de Sakura ¿a que sí, Shika? ¡Ah! Se me olvidaba, tengo una cosa que enseñaros: las fotos que hice del ensayo del jueves ¡Tachán!

Sumire puso encima de una mesa un paquete abultado.

- ¿Todas esas hiciste? - preguntó Ryuko.

- Me encanta hacer fotos, yo misma las revelo, por cierto ¿Sabéis si hay un club de fotografía?

- Humm - Akane parecía pensar - Creo que no... no... seguro, no lo hay.

- ¿No? ¿Estás segura?

- Si Akane la "estoy en todas partes" afirma que no, es que no hay - contestó Shikamaru.

- Akane forma parte del consejo de clubs - explicó Chouji.

- ¡Por favor, que pena! ¡Con la ilusión que me hacía!

- Mira Sumire - habló Akane - Por desgracia con eso de la fotografía digital cualquier mondongo puede hacer una foto, retocarla y convertirla en algo "genial".

- Es una pena - comentó Sai - porque la fotografía es un arte.

- ¿A que si? - a Sumire le brillaban los ojos.

Jisei regresaba, venía acompañada de Kankuro.

- Si que has tardado - dijo Ryuko.

- Me han entretenido ¡Y mirad lo que traigo!

- A mi persona - añadió Kankuro - ¿No es increíble?

- ¿Ya has comido? - le interrogó Sai.

- No, es que nos hemos sentado con los Hyuuga, con los dos ¿Os imagináis el ambiente?

- Pues Neji, Gaara, Hinata y Temari... seguro que muy ruidoso no era - comentó riendo Chouji.

- Y como el maestro estaba aquí... - continuaba Kankuro mirando a Shikamaru - Me he dicho ¡voy a ver si me da algún consejo! Porque claro, cierta bruja no me quiere ayudar.

Shikamaru le miró con su habitual cara de aburrimiento.

- Oye Jisei ¿Cuándo se han pegado Shino y éste? - preguntó Chouji.

- Chouji, déjalo - murmuró Shikamaru.

- ¿Te has pegado con Shino? - inquirió Kankuro.

- Yo no me he pegado con él, él me pateó el culo a mí ¿Podríamos hablar de otra cosa?

- Solo quiero saber cuando ha sido - explicaba Chouji - Me resulta raro que mi amigo se pegue con alguien y yo no me entere, además, una persona como tú, no me imagino que podría hacerte realizar tal esfuerzo físico.

- Una chica - sentenció Kankuro - Fue por una chica, seguro, o por eso o porque Shikamaru le mató alguno de sus bichos.

- Mira Chouji - interrumpió Shikamaru - Luego te lo cuento ¿vale?

- Y digo yo - intervino Sumire - Si sabías que Shino iba a arrear aquel puñetazo a Sasuke ¿Por qué le dejaste, Shika?

- Porque me apetecía ver al Uchiha por los suelos, es una satisfacción personal, es tan perfecto que... me da envida ¿vale?

- Espera, espera - Kankuro parecía muy interesado - ¿Shino ha dado un puñetazo a Sasuke? ¿Y yo me lo he perdido?

- Ha sido impresionante - puntualizó Chouji - Le ha metido el puño entero en todo el plexo solar, le ha dejado roto.

- Y se ha marchado como si nada - terminó Sai.

- A mi me daba pena - habló Sumire - Pobre chico...

- Shino se ha pasado tres pueblos con él - añadía Akane.

- Tú estás muy callada - se dirigió Shikamaru a Akane - Para ser la protagonista has hablado muy poco.

- Realmente Sasuke no se portó mal - respondió la chica - se le fue un poco la pinza pero...

- No tenía excusa ninguna - la interrumpió tajante Sai - Claro que merecía ese puñetazo.

- Pero Sai - dijo Jisei - realmente ese chico no sabía lo que hacía...

- Si lo sabía - continuó Sai - Eso se sabe. Puede que tengas razón y ese perfume fuera una especie de droga que nublara su mente, pero eso no es excusa, siempre tienes que respetar a la persona que te acompaña. El hecho de que ésta mañana pidiera perdón confirma que era muy consciente de lo que hizo y él mismo lo rechaza. Sabía que merecía ese puñetazo, por eso pidió perdón en público, esperaba que alguien se lo diese.

Sumire le miraba realmente embobada.

- Jo, Sai - dijo - ¡Qué profundo eres!

- Antes, como no tenía amigos, leía mucho.

- Y otra cosa - interrumpió Kankuro - ¿El lobo de Sasuke te atacó sin más o se disfrazó de abuelita para engañarte?

- Te equivocas de cuento - le contestó Ryuko - Ella no es Caperucita, es Cenicienta, así la llamaba.

- ¡Se acabó el tema! - Exclamó Jisei - ¿Qué es eso Sumire?

- Son mis fotos, las que hice el jueves ¿Queréis verlas?

- Claro, venga, enséñanoslas.

Sumire estaba feliz de mostrar sus fotografías. Las iba pasando y todos comenzaron a comentarlas y a decir lo bien que, a su juicio, estaban realizadas. Según Sai, Sumire era una gran artista capaz de captar la "esencia" de lo que fotografiaba.

- Estaba pensando - comentó Akane - Que podías apuntarte al periódico.

- ¿Al periódico?

- Sí, como reportera gráfica, vamos, fotógrafa.

- No se ¿Qué otros clubs hay?

- Esté el de arte - dijo Sai - La fotografía es un arte ¿no?

- Eso lo dices porque estás tú en él - gruñó Kankuro.

- Eres mas tonto que Picio - le dijo Jisei - Tú también estás en él, inútil.

- ¡Ah! Es verdad... Apúntate al de arte, yo hago marionetas, Sai dibuja...

- Otra cosa parecida no hay - añadió Akane - Ciencias Naturales, Botánica, Cocina, Ajedrez, el de lo Paranormal, que está Jisei, Arte japonés, Diseño, Fútbol, Tenis, Natación, Kárate...

Siguieron mirando las fotos y comentándolas.

Mientras comían Akane permaneció callada. Después de comer, incluso se retiró un poco del grupo. Shikamaru la miraba con el ceño fruncido.

- ¿Qué problema tienes? - le preguntó la chica al darse cuenta de que la observaba.

- ¿Yo? Ninguno, tú sabrás lo que haces.

- Ya... te veo venir.

- Te vas a meter en un lío.

- ¿Por qué se va a meter en un lío? - interrogó Sumire.

- Yo que tú - continuaba Shikamaru - Procuraba que ese chico no se hiciese ilusiones.

- Si es por eso, te puedes quedar tranquilo - replicaba Akane.

- Mira, yo de chicas no entiendo, me superáis, pero te recuerdo que te imbéciles sé un rato.

- Esto Shikamaru - intervino Jisei - Vuelve a tu aura normal y monótona, que esa te sienta fatal.

- ¡Jo, que rabia que no haya club de fotografía! - se quejaba Sumire.

- No te preocupes Sumire, bonita - habló Kankuro - que yo me ofrezco a ser tu modelo particular, me puedes fotografiar lo que quieras.

- ¡Kankuro! - Chilló Jisei - ¡Es que no te cansas nunca!

- ¡Akane, Akane! - Exclamó de pronto bastante agitada Sumire -¿Sasuke te besó? A parte del mordico, claro.

- ¿Ya estamos otra vez con los besos? - Se quejó Jisei - Ayer se pasó toda la tarde con el mismo tema.

- Tengo curiosidad.

- ¿Curiosidad por qué exactamente? - Kankuro sonrió de una manera que desde luego a Jisei no le gustaba nada - A lo mejor yo te puedo ayudar.

- ¿Por qué no te ayudas a ti mismo y te pierdes en una isla? - le gruñó.

Mientras Jisei, Kankuro y Sumire se enfrascaban en una absurda conversación, Chouji se acercó a Ryuko para comentarle algo. Shikamaru observaba de nuevo a Akane que, de nuevo estaba como abstraída en sus pensamientos. Se levantó perezosamente, cogió una silla y se sentó al lado de la chica.

- ¿Qué te pasa? - le dijo en voz baja acercándose bastante.

Akane se sorprendió un poco y a punto estuvo de gritarle cuando vio un gesto de preocupación en la cara de su compañero.

- No me gusta verte tan triste - continuó el chico.

- No estoy triste - contestó también en voz baja - Solo le doy vueltas a las cosas.

- ¿Qué te pasa? - Repitió - Dímelo, mujer.

- Solo pienso que todo es culpa mía, creo que le di demasiada confianza a Sasuke y eso es lo que me da rabia, no debí dejar que pensase... si es que no aprendo, si es que...

- Chisst, chisst, ya pasó - Shikamaru acarició el pelo de Akane apartándolo de su cara - No es culpa tuya, a nuestra edad es normal emocionarnos demasiado.

Akane le miró, no sabía porqué pero había momentos en los que Shikamaru le ofrecía un lado amable y confiable. Shikamaru apoyó su frente en la cabeza de Akane y rodeó sus hombros con sus brazos.

- Lo que ahora tienes que hacer es quitarte esa pulsera.

- Pero...

- Se que es un regalo, que es su manera de pedir que lo olvides y seguramente anoche estuvo por las tiendas se 24 horas buscando algo; tú lo has aceptado para demostrarle que no le guardas rencor pero cuanto más tiempo la lleves será peor, no será más que darle falsas ilusiones, ya sabes que los chicos malinterpretamos esos gestos. Es mejor para él y para ti que te la quites pronto.

Akane asintió con la cabeza. Le llamó la atención descubrir que no oía ninguna conversación a su alrededor.

- Shika, creo que nos están mirando.

El chico giró un poco la cabeza, efectivamente, 6 pares de ojos les miraban de lo más sorprendidos.

- Siempre podemos decir que el perfume aún funciona.

Akane sonrió.

El ruido de la puerta al abrirse sobresaltó a todo el mundo que dirigieron a ella su mirada. Era Temari que entraba.

- ¿Qué pasa? - preguntó algo extrañada al ver que todos la miraban.

Shikamaru se levantó, colocó la silla y volvió a su asiento, las miradas volvieron de nuevo a él.

- ¿Pasa algo? - preguntó.

- No... - balbuceó Chouji - Todo bien.

Miró a Temari, eso le recordaba que tenía que hablar con ella sobre lo que vio la tarde anterior y también con Ino sobre lo de las pastillas... ¡ay, que problemático era todo!

Sumire enseñaba sus fotos a Temari.

- Son buenas.

- ¿De veras te lo parece?

- Sumire - intervenía Akane - Piénsate lo del periódico, es una forma de hacerte propaganda. Este sábado es la semifinal de fútbol, nuestro equipo de juega su paso a la final, yo estaré allí para hacer un artículo y unas buenas fotos serían perfectas.

- ¿Me dejas esta foto? - dijo Sai mostrando una foto en la que se veía a Shikamaru bastante cerca de Akane, durante una de las representaciones espontáneas que realizaron de una supuesta escena de un galán seduciendo a una dama.

- Que bien hicisteis esa escena - comentó Temari, eres muy bueno Shikamaru.

- ¿Para que la quieres?

- Es que está llena de magia, parece que de un momento a otro el chico va a besar a la chica y me gustaría probar a ver si puedo dibujar la siguiente escena.

- ¿La que Akane le parte la boca a Shikamaru? - bromeó Kankuro.

- No... me gustaría poder transmitir tanta sensualidad como esta foto ¿te importa Sumire?

- No, a mi no. De todas formas yo solo fotografié lo que ellos hacían.

- Pero lo hiciste en el momento oportuno, realmente eres muy buena.

Mientras esto sucedía en el aula, en la zona habilitada como comedor, Sasuke seguía serio y taciturno. No había comido nada, ni tenía ganas, ni podía. A su alrededor, Sakura, Ino, Naruto y Lee revoloteaban armando ruido. Sakura estaba realmente preocupada por el aspecto de Sasuke.

- Me duele la cabeza, déjame.

- Venga si dejémosle - decía Ino - Vamos Sakura, vamos a dar una vuelta y vosotros también ¿No veis que le estamos molestando?

No muy convencida Sakura se levantó. Al cabo de unos instantes Sasuke estaba solo, no había mentido, la cabeza le dolía. Sintió que alguien se situaba detrás de él ¿Sería otro preguntando que le pasaba?

Shino se había colocado detrás de Sasuke, le miraba fijamente, sabía que el Uchiha se había dado cuenta de su presencia, con las manos metidas en los bolsillos de su chaqueta, le observó durante un rato, luego, lentamente se sentó a su lado, sin mirarle. Sasuke tampoco le miró.

- ¿Qué quieres? - preguntó secamente.

- Evidentemente hablar contigo.

- Creí que ya no habías dicho todo.

- Uchiha ¿Tú sabes por qué te he dado ese puñetazo?

- Por que me lo merecía, es eso ¿no?

- No.

- ¿Ah, no?

- No por la razón que tu piensas ¿De veras crees que tiene tanta importancia una marca en el cuello? ¿Crees que me ha enfadado que se te dispararan las hormonas Por favor Uchiha no seas simple, lo que me ha cabreado ha sido esa actitud de víctima que has adoptado.

Sasuke le miró de reojo.

- No seas ridículo - continuó - Ni quieras ofender mi inteligencia, antes en clase, Shikamaru para justificar el beso que le dio a Ino, y no contar la verdad, dijo "me dio un calentón" y todo el mundo le ha comprendido, puede que piensen que hay que saber contenerse, pero le han comprendido y nadie a organizado ningún drama. Por favor Sasuke ¡Que a todos se nos han calentado alguna vez los calzoncillos!

- No eso solo eso.

- Si lo es. Todo se resume en que te dio un calentón, así de simple, da igual que fuera espontáneo, que estuvieras borracho o que un perfume te pusiese como una moto, te dejaste llevar por tu instinto ¿Qué no esperabas ser tan bruto? ¿Qué deberías controlar tus impulsos caníbales? Pues si, pero que no es más que una anécdota también. Akane no se enfadó contigo, seguramente contó el incidente a sus amigas riéndose, eres tú el que ha organizado un drama y el que estás consiguiendo incomodarla. Por eso te pegué, pasó lo que pasó y no pasó nada, durante unos momentos te descontrolaste pero lo importante es que te diste cuenta ¿Crees que se merece que ahora vayas con esa maldita actitud de víctima? Eso es lo que me molesta de ti ¿Crees que eres tan perfecto que están por encima de cualquier deseo humano?

- Pero yo la ofendí.

- No la ofendiste, la ofendes ahora, ella misma me contó lo que pasó y en ningún momento la vi enfadada, ni ofendida, solo sorprendida ¿Crees que para ella tuvo más importancia que el resto de la tarde? ¿Crees que nadie ha intentado besarla nunca? No eres el primer chico que sale con ella, te lo recuerdo. Vuelve a la realidad Uchiha, yo que tú le pedía perdón, pero por la mañana que le estás haciendo pasar ¿Qué quieres? ¿Qué se sienta culpable o responsable de algo? Estas cosas pasan Uchiha, se pide perdón y se promete intentar controlarse la próxima vez y no pasa nada. En el fondo, a las chicas les gusta vernos descontrolados de vez en cuando, alimenta su vanidad. Tío ¿Y si hubiese pasado al revés? ¿Tan grave sería que una chica...

- ¿Tan ridículo soy?

- En estos momentos, si, eres patético. La estás ofendiendo, ahora sí la estás ofendiendo, como persona inteligente y como mujer. Recapacita Uchiha.

Shino se levantó.

- Gracias Aburame... por el puñetazo.

- Dime una cosa ¿Qué recuerdo ha quedado en tu mente de ayer? Dime solo uno.

- El sabor de la mandarina - respondió sin pensárselo.

Shino sonrió levemente y dio una palmada en el hombro de Sasuke.

- Estás perdido.

Cuando Sasuke regresó al aula, aprovechando el alboroto que siempre se organizaba y que Sakura e Ino estaban en una de sus habituales discusiones, se acercó a Akane que hablaba, apoyada en su mesa con Jisei, ésta al verlo acercarse miró a Akane y se retiró.

- Hola Akane - dijo tratando de mantener la naturalidad y sonrió.

- ¿Qué tal? ¿Te encuentras mejor? - Respondió la chica como si nunca hubiese pasado nada - ¡Ah! Gracias por las gafas, creí que las había perdido y gracias por la pulsera, es muy bonita.

- Cuando la vi me recordó el color de tus ojos.

- Es un detalle muy bonito pero no hacía falta.

- Es un recuerdo, de una tarde estupenda.

Akane le regaló una sonrisa abierta y sincera. Casi con miedo, Sasuke puso sus dedos en el cuello de la chica, allí donde la había mordido.

- ¿Te duele?

- No, que va. Anda, que ahora tengo la marca del Uchiha, que suerte tengo ¿eh? Más de una se moriría de envidia.

Sasuke no podía evitar sonreír.

- Perdóname por lo de ésta mañana, creo que exageré un poco.

- ¡Pero valió la pena ver la cara de Neji!

- Eres increíble.

- Y maravillosa, lo sé. Anda, ve con tus amigos antes de que se escamen.

- Y no tiene abuela - añadió Shikamaru desde su sitio - Pero vamos, se la puede aguantar.

- ¡Nara! - Gruñó Akane - ¡No me hinches las narices!

Dedicándole una última sonrisa y sintiéndose mejor consigo mismo, Sasuke se marchó a su asiento. Jisei, por el contrario, se acercó a Shikamaru.

- ¿Sabes una cosa?

- ¿Me vas a echar un mal de ojo?

- Echaba mucho de menos ese aura tuya tan cálida ¿Por qué te empeñas en esconderla?

Lo que le faltaba, la loca de Jisei con un acertijos.

Naruto por parte, miraba a Sasuke.

Había sido un gesto, un gesto rápido y leve, un gesto quizás hasta tonto, sin embargo, unos ojos azules habían captado ese rápido, leve y tonto gesto en el rostro de Sasuke, y no le gustaba nada lo que había visto.

Naruto puede que no fuese muy inteligente y que a veces le costara comprender las cosas, puede que a veces pareciera demasiado atolondrado y puede que fuera verdad, era un cabeza hueca; sin embargo había una cosa que hacía mejor que nadie: sabía ver en el corazón de las personas, podía leer en los ojos de cualquiera aquel sentimiento escondido que nunca mostraban y sabía entender cualquier gesto, por rápido, leve o tonto que fuera, mejor que nadie. Y aquel chico alegre, efusivo, hiperactivo y cabeza hueca, sintió como un poco de tristeza se instalaba en su corazón. Giró su vista hasta aquella chica que tanto le gustaba, con su pelo rosa y sus ojos verdes.

"No hagas daño a Sakura, por favor Sasuke, no la hagas daño" Fue la súplica que, sin él pensarla inundó su pensamiento.

Miró de nuevo a Sasuke, le notaba algo distinto, no sabía decir el qué, quizás era su mirada o su rostro... era difícil de decir, pero que había algo distinto no lo podía negar.

Volvió a mirar a Sakura, luego a Akane y de nuevo a Sasuke... no, aquello no le daba muy buena espina ¿Es que Sasuke había comenzado a intersarse por Akane? ¿Por qué? Nunca había visto a Sasuke sonreír de esa forma a nadie ¿Qué pasaba con Akane? ¿Es que Sasuke no tenía en cuenta los sentimientos de Sakura? ¿No era su amiga? No, claro, no había nada que le obligase a hacerlo y sin embargo Naruto sentía como si la estuviese traicionando de alguna manera.

En realidad Sasuke en quien estaba pensando era en Sakura. Pensaba que siempre la había considerado una pequeña molestia, siempre a su alrededor y que había tardado en darse cuenta de que lo único que quería era hacerse su amiga. Quizás siempre había sido muy desconsiderado con ella, quizás Akane tenía razón, era un ser humano, no una muñeca y él... ¿Qué sentía? Quizás quería que se quedara Naruto con ella solo para quitársela de encima... Debía hablar con ella, debía saber que sentía exactamente por ella, si no, esa sensación de "hacer algo malo" no desaparecería... pero antes, antes tenía hablar con Naruto, si, necesitaba hablar con él.